Ir al contenido principal

The Watchmen.


En Estados Unidos, me compré las dos obras más celebradas de Alan Moore. Ya hablé de "V for Vendetta" en otra entrada del blog. Hablaré hoy de “The Watchmen”, que he acabado en las últimas noches. Bueno, digo “he acabado”, con mucha alegría, ya que “The Watchmen” es un cómic (una colección de 12 números), poliédrico y complejo. Es decir, creo que esas viñetas dibujadas por Gibbons y coloreadas por Higgins y esos diálogos en los que se entremezclan paráfrasis de Blake con continuas referencias a la historia contemporánea, me van a dar para muchas lecturas y relecturas. “The Watchmen” se desarrolla en los años 80 de un mundo muy parecido al nuestro; pero con ligeras diferencias, donde ha habido una guerra de Vietnam, Nixon sigue de presidente y parece que puede haber un conflicto nuclear entre los USA y la Unión Soviética, a raíz de la intervención rusa en Afganistán.

Los protagonistas son una colección de superhéroes viejunos y retirados de la circulación por un decreto gubernamental. En un contexto de creciente conflictividad social y de tensión internacional, algunos de esos superhéroes se ponen otra vez los leotardos para investigar un complot. El cómic, obviamente, dio para una peli, que no he visto, y para muchos debates sobre el concepto de superhéroe y de supervillano, esa potentísima creación de la cultura del siglo XX. Quizá una de las más interesantes. “The Watchmen” (que se traduce como “Los vigilantes”) es la reflexión última sobre ese concepto, la meta historia de los justicieros en calzoncillos, que tanta influencia han tenido sobre nuestro imaginario colectivo.

En mi opinión, lo más interesante de entre los muchos asuntos sugeridos por “The Watchmen” es aquello de quién vigila al vigilante: el “Who watches the Watchmen?” en la obra o el “Quis custodiet ipsos custodes?” de los clásicos. O dicho de otro modo, la legitimidad de la violencia. En la situación en la que estamos en el sur de Europa, cuando se están produciendo transferencias masivas de renta desde las clases medias hacia el capital, va a haber violencia. Nadie deja que le empobrezcan sin hacer nada. En nuestras democracias indirectas, ese cambio social lo están gestionando partidos que han ganado en las urnas (en España, el Partido obtuvo el 31,98% del censo). ¿Tienen legitimidad para llevar a cabo lo que no anunciaron en campaña? Todos sabemos que esos partidos tendrán que cumplir las exigencias del capital y llevarán a cabo su programa de pauperización sin temblarles la mano. Sus watchmen trabajarán a destajo para disolver las protestas. Ya lo están haciendo en Valencia. Pero, cuidado, porque cuando se acaben las últimas monedas de las arcas públicas y no haya ni siquiera para pagar a los watchmen, quizá estos también empiecen a usar sus superpoderes contra el Partido y sus jefes allá en Bruselas y en la City.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Asesinato en el campo de golf.

La realidad siempre supera a la ficción. Ni el mejor Azcona podría haber imaginado la boda cortesana del otro día ni el más inspirado Berlanga, rodarla. Fue una inundación de imágenes ridículas, un tsunami de mal gusto, una representación prodigiosa y completa de todo lo vano y risible de nuestra sociedad. Dicen que el humor siempre ha de apuntar hacia adentro y hacia arriba y apuntar bien la pistola es difícil; pero las imágenes que, como huesos, tuvo a bien echarnos la tele de Ayuso eran una diana gigantesca, grande como un océano de paradojas. Dispararas donde dispararas, acertabas. NO piensen que les deseo unos tiros o unas bombas a los convidados. Sobre eso, volveré más adelante. Al revés, hay que agradecerles a todos que acudieran disfrazados a la iglesia de San Francisco de Borja para alegrarnos la vida y recordarnos, con humor y gracia congénita, cuán estúpido es nuestro reino y cuán absurda es la existencia humana. Dios, gracias por el fuego y por el humor. Semejante orgía de

Las bombas del 11M. Relato de los hechos en primera persona (3).

Si no hubiera habido elecciones el 14 de marzo, los hechos que he descrito en la entrada anterior no se habrían puesto en duda. Los posibles fallos policiales y de inteligencia previos a los atentados (especialmente, los relacionados con la llamada "trama asturiana" y el control de la dinamita) habrían sido más o menos ocultados a la opinión pública y salvo en las casas de las víctimas, la vida seguiría más o menos igual. Pero hubo elecciones y el PP y muchos de sus votantes sintieron que se las habían "robado" y que Zapatero era un presidente "ilegítimo". Así que es lógico que, durante un tiempo, en el partido perdedor, negaran la realidad. Necesariamente tenía que ser ETA, porque nosotros nunca mentimos y los que fallaron fueron los votantes, que se dejaron engañar. Ya se sabe que los españoles son flojos e influenciables. En la comisión de investigación parlamentaria del 2004, muchas de las preguntas del PP intentaron, sin éxito, vincular a ETA con los

The royal game.

La famosa "Novela de ajedrez" de Stefan Zweig suele ser la primera obra literaria que cualquier lector occidental citará en relación al juego-ciencia. La imagen social del ajedrez, o mejor dicho, de los ajedrecistas, ha sido muy influida por esta novela breve. Muchos críticos la consideran la mejor obra del austríaco. Yo prefiero "Momentos estelares de la humanidad".  Zweig publicó "Novela de ajedrez" en 1941, durante su exilio brasileño. Se suicidaría poco después, desesperado ante los continuos triunfos nazis. Hace muchas vidas, vimos la peli " Farewell to Europe " sobre los últimos años del gran escritor.  Un trasunto del mismo Zweig, el misterioso doctor B. viaja en un transatlántico Nueva York-Buenos Aires. A los ajedrecistas, este planteamiento les traerá a la memoria las célebres olimpiadas de 1939, después de las cuales, varios jugadores europeos decidieron quedarse en Argentina. El doctor B. fue detenido por los nazis después del Anschlu