Dedico la última entrada de las vacaciones a los libros sobre mapas que me han entretenido durante este mes de agosto tranquilo, pesadote y largo. Me los fui comprando en la librería del Puerto de Sagunto. Siempre me han gustado los mapas. Recuerdo la alegría que me produjo que Javi me regalara el mapa de carreteras de Gran Bretaña e Irlanda que habíamos usado en el gran viaje por Escocia. Fue hace muchos años, cuando todavía se usaban los mapas de carreteras y el independentismo escocés era una fuerza política marginal. Una vida ha pasado desde entonces. Me gustan los atlas históricos, así que me compré "Segunda guerra mundial. Mapa a mapa." que he ido consultando según he visto algunos capítulos de las series de la amplia oferta televisiva dedicada a aquella guerra. También he disfrutado mucho "Atlas de fronteras insólitas", una interesante recopilación sobre los enclaves, fronteras indefinidas, islas compartidas, que la historia ha venido deparando. La curiosa...