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Mostrando entradas de julio, 2008

"Yo serví al rey de Inglaterra", de Jiri Menzel

" Los checos no somos guerreros " dice el protagonista, justificándose a sí mismo. Enlaza así con ese espíritu pícaro pero torpón, pusilánime y sin embargo, sutil, que recorre gran parte de la tradición cultural checa desde "el bravo soldado Svejk" y del que esta comedia es una divertida prolongación. Se trata de la historia del camarero Jan Ditie, que en su vejez recuerda los distintos acontecimientos de su azarosa vida. Ditie es un hombre pequeñín e inofensivo que a menudo, pasa inadvertido para los otros hombres, pero que está dotado de cierto ingenio natural y sobre todo, de un aura de ternura que lo convierte en irresistible para todas las mujeronas con las que se va cruzando (siempre más altas que él). Dos excelentes actores interpretan a Ditie: (Ivan Barnev, en su juventud y Oldrich Kaiser en la vejez). Ditie va trabajando en distintos sitios: una cervecería de pueblo, el caro burdel Tichota, el lujosísimo café París en Praga. Observa las debilidades humanas

"La gran tentación" M. Ros Agudo.

En los últimos años, han tenido gran éxito de ventas diversos libros que reinterpretaban aspectos de la historia española contemporánea desde un punto de vista que se ha dado en llamar "revisionista". Es decir, sus autores intentan justificar, en la medida de lo posible, el golpe de estado del 36, realzar los crímenes cometidos en la zona republicana u ocultar los aspectos más terribles de la dictadura posterior. No soy historiador profesional; pero creo que es difícil rebatir los argumentos de alguno de estos autores porque se mueven a menudo en el campo de la interpretación de intenciones, no en el de la constatación de los hechos. Sus fuentes son, por lo general, las memorias o biografías personales y no los documentos. Así que la aparición de este libro es una brisa fresca en este ambiente enrarecido. El autor demuestra, sin lugar a dudas, que el régimen triunfador de la Guerra española era un régimen fascista y agresivo y que estuvo a punto de participar como beligerante

El imperio del sol.

Creo que era una de las pocas películas de Spielberg que no había visto hasta ahora. Y pasé un rato entretenido y facilón, con pocos quebraderos de cabeza. Supongo que es la marca de la casa: buenas historias, buena construcción cinematográfica, hermosa fotografía y no le déis al coco, que esto es un negocio. Es la historia de un niño británico (Christian Bale) que, durante la ocupación japonesa de Shangai, se ve separado de sus padres. Estará hasta el fin de la guerra en un campo de concentración, contiguo a un aeródromo nipón. Vemos como va creciendo y se convierte en un "superviviente nato", de la mano de un norteamericano sin raíces ni escrúpulos (John Malkovich). Ve a los kamikazes salir para el combate, mientras come gorgojos de las patatas, estudia latín, como buen gentleman inglés, y se va haciendo un hombrecito. Todo muy bien hecho y muy bien contado. Aunque la historia suene dura, Spielberg pule las aristas para que quede presentable, es decir, vendible para todos l

Irina Palm

Nos gustó el trailer; pero se pasó el tiempo y no la pudimos ver en el cine. Afortunadamente, la han sacado en DVD y la vimos la semana pasada. A mí, me gustó. Quizá esperaba algo más; pero la peli tiene un planteamiento que funciona muy bien durante todo el metraje. Pasé un buen rato. Es la historia de una joven abuela (Marianne Faithfull) que en un último intento para conseguir dinero y salvar la vida de su nieto, desahuciado por el sistema sanitario público, se pone a trabajar en un burdel del Soho. Le hace pajas a los clientes a través de un agujero. Ha dedicado su vida a los demás en un mundo limitado y mojigato y ahora se encuentra a sí misma en una ocupación laboral poco convencional, en la que al parecer, es muy buena. "Tienes la mejor mano derecha de Londres", le dice el chulo (Miki Manojlovic). No sé cómo se denomina técnicamente esa clase de servicio. Los congresistas norteamericanos, expertos en estas cosas, podrán discutir si lo que la protagonista hace es prost

En el remolino. José Antonio Labordeta.

José Antonio Labordeta no es (o no es solamente) el de la mochila de la tele, ni uno de los cantautores que permitieron a Aragón reencontrarse consigo mismo, ni el profesor de secundaria retirado, ni el ex-diputado alternativo que hablaba de Teruel, mientras los diputados conservadores berreaban. Labordeta ha sido, y es, principalmente, un poeta. Quizá no sea el gran vate de las letras españolas (le faltaría pluma, imaginación y padrinos), ni el gran poeta aragonés contemporáneo (él siempre pone a su difunto hermano Miguel en ese lugar); pero es un poeta. Y con eso, se ha ganado bastantes almuerzos. Y este breve relato (cuya primera versión es, al parecer, de 1975) tiene, en mi opinión, más de poético que de narrativo. Es la vieja historia sangrienta y brutal, contada tantas veces: la violencia ciega que se apoderó del Aragón rural con el golpe de estado de julio del 36 y el vacío de poder. Dice con estilo valleinclanesco: " Don Rogelio, llame a los guardas, rogó el juez- Pero

Encuentro con el Otro.

El último libro del gran Ryszard Kapuscinski no trae recuerdos de sus viajes a terribles guerras postcoloniales, ni reportajes sobre África o sobre Centroamérica. Se trata de una breve recopilación de conferencias del célebre periodista polaco acerca de lo que él llama "el Otro": el extranjero, el diferente, el "que no es como yo". Una vez más, pienso lo acertado que fue el que le concedieran el Premio Príncipe de Asturias en el 2003. Parece que además de dárselo a deportistas profesionales, también se lo dan de vez en cuando a humanistas. Y en un ejercicio profundamente humano, Kapuscinski indaga en las múltiples dimensiones de la "otredad". El "otro", especialmente cuando no es un occidental, nos enseña mucho de nosotros mismos: actúa como espejo, como baremo de nuestra personalidad, de nuestra capacidad para el diálogo. Kapuscinski llegó al concepto de "otro" al descubrir que, a su vez, él era también un "otro", especialmen

Aritmética emocional (P. Barzman,2007)

Después de esperar en vano durante varias semanas la reseña que iba a hacer mi novia sobre esta peli que vimos juntos, la tengo que hacer yo (que dura es la vida del blogger!). Quizá el tiempo transcurrido me aclare un poco la opinión sobre esta película inusual. Al salir del cine, no tenía nada claro si me había gustado o no. Trata el encuentro de 3 personas que coincidieron en Drancy, uno de los campos que la Francia colaboracionista organizó para agrupar a los judíos y enviarlos a los mataderos nazis. Max Von Sidow era el mayor de ellos e hizo de protector de los otros dos (unos niños entonces): Susan Sarandon y Gabriel Byrne. No se han visto desde hace 40 años; pero aquella tragedia marcó sus vidas y las sigue condicionando. Plummer hace de marido de Sarandon. La ha protegido de sus miedos y de las horrorosas sombras del pasado; pero no puede evitar que ese pasado vuelva con el reencuentro. La peli pretende responder a las preguntas de hasta qué punto se pueden cerrar las heridas,

José Luis Cano: Sender, Goya, Buñuel

En plena polémica por la autoría de "El coloso", miro estos cuadernillos del dibujante José Luis Cano que retratan a tres colosos: Goya, Sender, Buñuel.Uno del Altoaragón, otro del Bajoaragón y el otro enamorado y a la vez, harto de la capital del país, provinciana y clerical. " En pensar en Zaragoza y en pintura me quemo vivo " Los tres se exiliaron. Los tres eran taciturnos, fuertes, de carácter arisco, impacientes, desagradables, viriles, dominantes, geniales. Cano cuenta que cuando el médico sacó a Sender del vientre de su madre y le dió el primer cachete para que rompiera a llorar, Sender se lo devolvió. Los tres vivieron épocas de grandes cambios (formaron parte importante de esos cambios). Los tres soñaron con un mundo mejor; pero vieron como el sueño de su razón se convertía en una tragedia poblada de fantasmas horribles, que intentaron exortizar con su arte. Los tres huyeron y murieron lejos de Aragón. En la actualidad, la cultura aragonesa (si se consider

En el punto de mira. (Vantage Point, 2008).

Ayer me dejé embaucar por el aspecto externo de esta película. Os aviso para que no caigáis en la trampa. La cosa parecía, a priori, digna: un atentado contra el Presidente de los Estados Unidos (William Hurt) en una conferencia internacional celebrada en Salamanca. Los hechos son contados desde distintos puntos de vista a partir de un mismo momento del tiempo. Pero al director, a los guionistas y a los productores se les va el tema de las manos y la peli se convierte en un conjunto histérico y deslabazado de tiros, persecuciones y personajes sin sentido (especialmente el de Noriega), que hablan mediante acrónimos (POTUS, ETA, etc.) Lo único interesante son las caras de tonto que pone Whitaker y la manera en que se representa a la ciudad de Salamanca y sus habitantes. Según les parece a los norteamericanos, todos los helmánticos son latinoamericanos que agitan rojigualdas mal hechas, mientras explotan bombas a su alrededor. Huyan de este bodrio.

Un plan brillante (Flawless). M. Radford, 2007

Anoche vi esta simpática peli de robos. Se trata de una historia sencillita y agradable, con un par de sorpresas inteligentes y bien contadas. Yo iba predispuesto: las primeras imágenes muestran unas manos negras revolviendo el barro en busca de diamantes, se supone que en algún lugar de África. Otras manos negras, entregan esos diamantes a unas manos blancas. Inmediatamente, viene a la memoria " Diamantes de sangre ". La peli trata un gran robo de diamantes en Londres, con mucha moralina incorporada "quien roba a un ladrón..." Un poco de feminismo y un poco de análisis del comportamiento criminal de las multinacionales. El mensajito les queda demasiado evidente. Caine lo hace bien, como casi siempre. En cambio, no acabo de ver a la Moore en la estética de los primeros años 60. Noches de verano, agradables y tranquilas, lejos de donde hay guerras por los diamantes.