Acabé anoche "El subdesarrollo social de España. Causas y Consecuencias", la última obra del conocido profesor Vicenç Navarro. Del mismo autor, ya había leído "Bienestar insuficiente. Democracia Incompleta. De lo que no se habla en nuestro país" (Premio Anagrama de Ensayo 2002). Se trata de dos obras muy parecidas. que defienden las mismas tesis. Sin embargo, me da la impresión de que Navarro se moja más en lo partidista en su último libro. Reconoce abiertamente su lucha por influir y su influencia en el programa electoral con el que el PSOE ganó las elecciones generales del 2004.
Las ideas que defiende Navarro son las siguientes: en España no se ha alcanzado realmente el estado del bienestar que sí se llegó a alcanzar en otros países europeos (sus referencias a los países nórdicos son constantes). En España no se alcanzó ese estado del bienestar por el predominio político de la derecha (durante la dictadura y durante la transición) y de las clases sociales a las que representa. Es necesario que, tanto en España como en otros países de Europa, se adopten y se retomen políticas en la dirección del estado del bienestar. Esas políticas, enfrentándose a lo que es actualmente el dogma dominante en política económica, se basarían en un incremento de la fiscalidad, en una ampliación de la cobertura social y en una mayor incorporación de la mujer al mundo del trabajo (mediante políticas de genero).
El libro es fácil de leer y contrariamente a lo que pensé en un primer momento, me ha resultado interesante. Pero no las discusiones en torno hasta qué punto España es un estado social; todas ellas basadas en cifras y en porcentajes que me sonaban bastante lejanos, sino los asuntos estrictamente políticos (lo que el autor engloba en la parte de "causas"). Destacaría la convicción con que defiende la vigencia del concepto de "clase social", la discusión acerca del carácter de la dictadura de Franco, cuyo carácter plenamente "fascista", en lo doctrinal y en lo económico, intenta demostrar y la constatación de cómo el "establishment" catalán ha usado el debate identitario para mantener los privilegios de lo que llama "clases altas" en Cataluña.
Comentarios