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Enemigo a las puertas


Por la mañana, estuve hablando con unos amigos sobre Stalin. Quizá por ello, me saqué del vídeoclub esta peli bélica, ambientada en la batalla de Stalingrado. He visto esta producción europea varias veces y los primeros veinte minutos de metraje siempre me parecen sobrecogedores. Vemos llegar a los jóvenes procedentes de todo el imperio, que son arrojados sin armas y sin preparación al matadero del Volga. La Wermacht se limita a ametrallarlos y los cadáveres caen sobre otros cadáveres, hasta formar una muralla de carne humana. A pesar de la imbecilidad y la corrupción staliniana, Rusia fue capaz de parar la embestida nazi sacrificando a millones de personas. La película nos cuenta las aventuras entre las ruinas humeantes de un francotirador de los Urales, Jude Law. Al parecer, el personaje que interpreta, Vassily Zaitsev, fue real. Y se convirtió en un mito a través de la propaganda militar. Se escondía entre los escombros para ir cazando oficiales. Era una guerra dentro de la guerra. Mandan un francotirador alemán para neutralizarlo, Ed Harris. Y la historia coge un tono western que ya no me gusta tanto. El duelo entre ambos llega a cansar un poco. La presencia de la guapísima Rachel Weisz endulza todavía más la situación y hace la cosa menos creíble. Con todo, me parece un peli muy recomendable. Porque cuenten lo que cuenten los americanos, la guerra de verdad estaba en el otro lado.

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