Ir al contenido principal

La Vaca

Ahí va la reseña a la tercera comedia. Y el final de mis estúpidas divagaciones sobre la risa y la sonrisa.

¿Cuál es la obra cómica que más ha influido en la cultura contemporánea? Habrán oído hablar de ella, aunque casi nadie la haya leído. De hecho, yo solo conozco personalmente a uno que lo ha hecho. Y creo que está en la cárcel por participar en alguna mani de la PAH. Así que casi nadie sabe que la obra que digo es un cachondeo, un despelote, una risera tan grande que acabas llorando de pena, después de haberte cagado de la risa... Se trata de "El Quijote", por supuesto. 

Cervantes la comenzó como un chiste breve, como una comedia corta y absurda. Imaginen al tonto del pueblo con un bidet en la cabeza que habla como supuestamente hablaban los caballeros de hace mil años, vagando por tierras de nadie, disfrazado con el camisón de su abuela, sin objetivo, sin sentido. O mejor dicho, con todo el sentido del mundo: el de hacer el bien y parar desahucios. ¿Es para reírse o no? La genialidad de Cervantes fue darse cuenta de que el tema daba para mucho más, y que la locura, la broma, la justicia y la tragedia andan siempre a lomos del mismo jamelgo ridículo. Tan ridículo y tan tierno como aquellos pobres maestrillos de pueblo que intentaban enseñar a leer el español a los aldeanos con esos tochos cervantinos llenos de chistes inteligentes y de frases anacrónicas compuestas a partes iguales de sabiduría y de locura. O peor, tan ridículo y tan grotesco como los que ahora consideran a aquel fantoche apaleado un símbolo de La Mancha o de su España y protestan porque se recorten unos céntimos las subvenciones a las corridas de toros, esa parafilia particular. 

La risa, la sonrisa, la ternura hacia las pequeñas cosas que amamos; pero también el absurdo y la sombra de la tragedia siempre van de la mano por los mismos caminos polvorientos. En esta comedia, el que va por los verdes caminos de Francia llevando a su vaca es el bueno de Fatah, el tonto de un pueblo remoto de Argelia. Después de leer muchos libros de caballerías, perdón, después de ver muchas veces en la tele, una feria agrícola en París, se obsesiona con que tiene que llevar allí a su vaca Jacqueline, para que todos la admiren y la quieran como él la admira y la quiere. Varias veces está a punto de morir ahogado, apaleado o congelado. Y eso es lo divertido del asunto. Y en el viaje, encuentra sus propios Sanchos: a su pícaro cuñado y a un aristócrata taciturno. Excelente actuación la de los cuatro (Fatsah Bouyahmed, Jamel Debbouze, Lambert Wilson y la vaca). También vemos agricultores franceses esa gente tan gritona e imbécil como los agricultores españoles. Y por supuesto, hay un final feliz, porque la feria agrícola es una especie de Operación Triunfo y la gente vota, grita y se ríe. Y muchos de los votantes son de origen argelino. Si a los franceses blancos no les gusta tener vecinos morenitos, que se jodan, que no hubiesen invadido, explotado y ensangrentado Argelia durante 130 años.

Disfrutamos la comedia, nos reímos y nos sonreímos y en el salón quedó un tierno olor a leche de vaca. Las perritas se quedaron dormidas junto al fuego. Lara y Bimba no sonríen. Si supieran hacerlo, también se les habría dibujado en el hocico una tierna sonrisa porque estaban soñando que yo las llevaría alguna vez a una feria canina en la verde Francia.


 




Comentarios

Entradas populares de este blog

Mis pequeñas perras, Lara y Bimba, en el Museo del Prado (1).

El otro día, la pequeña Bimba se cagó en la sala 55A del Museo del Prado. Como soy un buen ciudadano, lo limpié rápidamente. No vaya a ser que algún señor pisara la cosa visitando "El triunfo de la muerte", de Pieter Brueghel "el viejo", una de las obras más impresionantes de la colección. Recuerdo la primera vez que vi "El triunfo de la muerte" y sus predecesoras: "El jardín de las delicias" y "Las tentaciones de San Antonio", de Jheronimus van Aken, "el Bosco", que están en la sala de al lado. En la enciclopedia Larousse de casa. Pensé que había un error. Creí, en una primera mirada alucinada y confusa, que, en realidad, aquellas fantasías flamencas no eran trípticos (óleo sobre madera) de finales del siglo XV y mitad del XVI, sino obras contemporáneas. Pensé que aquellas extrañas imágenes de muñequitos, cadáveres y pavos reales eran la broma de un asesino en serie que le quería mostrar a los detectives del FBI todo lo que e...

Mis pequeñas perras, Lara y Bimba, en el Museo del Prado (2)

Mis perritas, Lara y Bimba se pasean todas las mañanas por el Museo del Prado porque es de todos. Es público. Es de los españoles, de la humanidad y de la caninidad.  Cada vez que algo valioso pasa al común, a la universidad, como decían los antiguos, es un pasico adelante en el lento curso de la historia, esa fulana retorcida. El museo, como tal, fue fundado durante el reinado de Fernando VII (IV en Aragón). El llamado "rey felón", además de un pene grande y de un criterio moral pequeño, heredó la más formidable colección de arte pictórico de la civilización occidental. Afortunadamente, en 1814, decidieron dar cobijo a ese inmenso tesoro en el edificio que había diseñado Juan de Villanueva antes de la francesada. En 1869, tras la primera expulsión de los borbones (aplausos y vítores), se declaró el museo y su contenido "bienes de la Nación". Me gusta contemplar el "Agnus Dei" de Zurbarán. El maestro usó varias veces el motivo del cordero sacrifi...

Cónclave

No todo el mundo puede decir que un cura de su pueblo pudo haber sido papa. Yo tampoco puedo decirlo. Al menos, con absoluta seguridad. Pero las historias que he oído al respecto parecen verosímiles. Dicen que después de que Ratzinger renunciara al cargo, en el cónclave de marzo de 2013, se reprodujo la misma división que ya habían sufrido cuando lo eligieron. Así que parecía razonable que buscaran a alguien que suscitara consensos. Además, me figuro que entre los requisitos del nuevo estaba que su lengua materna debía ser el español o el portugués, las lenguas mayoritarias del catolicismo. No es demasiado aventurado pensar que mi paisano estuvo entre los principales candidatos. Lo cierto es que la primera visita del recién coronado Bergoglio fue a Santa María la Mayor, donde tenía el arciprestazgo el de mi pueblo.  Por todo esto, se pueden imaginar el interés con el que fui al cine. Idea de mi sobrino del sur, que ha venido muy cinematográfico estas vacaciones. Los efectos de la e...